Relajarme es abrirme al Gozo

Pocas mujeres saben que dentro de ellas está el camino del gozo, que no hay nada externo que nos traiga tanta dicha como la conexión y el amor a nosotras mismas… Pero cada día somos más, más mujeres que nos contamos al oído los secretos sutiles pero transformadores que hay dentro de nosotras.

Atrás quedan milenios de represión, negación, abandono y maltrato de nuestro cuerpo, atrás quedan ya la desconexión de nuestros pulsos. Es hoy cuando abres la mirada a tu cuerpo deseante de escucha y anhelante de placer genuino y propio.

Conectar con la sabiduría de nuestro cuerpo es el proceso más empoderador que podemos vivir las mujeres y para ello se hace necesario que exploremos la relajación.

En este último siglo hemos trabajado duro por nuestra autonomía, por el reconocimiento social de nuestros dones y talentos, por equiparar nuestras cualidades y encontrar el lugar en el mundo que nos arrebataron. Este tránsito nos ha desconectado de nuestra sabiduría interna a medida que dedicábamos más energía a ser visibles y menos al cultivo interno, más energía a la contracción propia de la acción que al gozo y la sabiduría de la relajación.

Ahora las mujeres también estamos retomando nuestra sabiduría instintiva y para algunas de nosotras la maternidad ha sido un proceso clave para entender nuestro cuerpo a través de poner atención a nuestras funciones sexuales y desarrollando el acceso al placer como mecanismo para transformar la abnegación y el sacrificio social.

Este es un proceso re-evolucionario por el que nuestra pelvis cobra de nuevo la libertad perdida a través de milenios de represión sexual y contracción muscular.